Spain of the Dead, (c) Gabriel Cordero Huertas / Dr. Worst

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Con todo el cariño al equipo de rodaje de Juan de los Muertos

viernes, 27 de marzo de 2020

Nos timan como a chinos



¿Qué decir hoy del escándalo de los test rápidos? Resulta que nuestro increíble gobierno sociolisto, ha comprado 900, según ellos, después ha resultado que son ¡650.000! osea ¡todos! Test que no cumplen los más mínimos requisitos de fiabilidad. Su fiabilidad estadística es del 30%. Ahora nos dicen también que lo han descubierto mediante ensayos y test de nuestros grandes científicos (que lo serán, aquí lo que apesta es el gobierno) , cuando en el propio prospecto indica claramente que el margen de error es del 30%, es decir tienen nula relevancia estadística sus resultados, y no tienen aplicación sanitaria alguna. Un timo en toda regla. Un timo del que el gobierno además e ha enterado porque el embajador chino se lo ha comunicado, sorprendido porque resulta, que, nada más y nada menos hemos comprado el material a una empresa que ¡carece de licencia para fabricarlo!!! ¡material pirata! Ni más ni menos. Si no estuviera muriendo gente, esto sería una comedia.


Nos timan «como a chinos», una expresión por todos conocida, que no me gusta utilizar, aunque en realidad está ahí en el lenguaje popular como testigo de las masacres que los estadounidenses cometieron con los emigrantes de aquel país, para construir su «gran» nación. Por si alguno no lo sabe, recordaré que los de timar como a un chino, viene de que aquellos criminales, constructores del ferrocarril (retratados por Sergio Leone en «Hasta que llegó su hora») contrataban mano de obra china, por un precio tan ridículo, que les permitía ahorrarse el dinero en mecha. Así tenían que dinamitar aquellos infelices, colocando el cartucho para salir corriendo, y si no eran lo suficientemente rápidos, volar con la roca. Es decir, menos valía el sueldo y el chino que la mecha de un cartucho de dinamita. Estas son las lindezas que deberíamos recordar del país de la libertad, el mismo del cuya aspirante al gobierno Hillary Clinton, quería promover una guerra en Europa contra Rusia, para que no se quejemos de Trump...


Pues bien, hoy somos nosotros los «CHINOS», y los chinos no solo son los que mejor han sabido gestionar esto, sino unos de los pocos amigos sobrevenidos que tenemos, pues frente a nuestros «socios» Europeos, como lo Países caídos bien Bajos, que proponen sancionar a España por no haber previsto el coronavirus, en vez de ayudarla (y es cierto que el gobierno merece algo, más que una sanción, pero no la gente que está muriendo) o la Alemania de Merkel, que sigue construyendo su IV REICH, todavía llamado UE, resultan que son esos Chinos de los pocos que nos han ayudado.


Pero es que nuestro propio gobierno nos trata como a chinos … miente una y otra vez, en la universidad sabemos que es seguro que el estado de alarma seguirá prorrogándose, que el pico no se alcanzará hasta casi Junio, que el clima que tenemos (tanto hablar de calentamiento global y hace más frio que nunca en esta época del año) no acompaña y permitirá la proliferación de un virus que se destruiría solo con las altas temperaturas y el sol a que antaño estábamos acostumbrados, que los tratamientos que se están proporcionando son ineficaces, y que las estadísticas no valen nada, puesto que no se hacen test o los que se hacen no tienen validez alguna. Las únicas estadísticas fiables son los modelos teóricos de propagación que manejan algunas universidades, cuyas predicciones dejarán de hacerse públicas. ¿Sospechoso? , oscurantismo, decretazo digital, estupidez y mentira.


Hoy mismo una madre tenía que esperar en la calle en un municipio sevillano para que atendieran a un bebé con síntomas. Para acceder tras horas a un consultorio dantesco, donde los médicos que trabajan envueltos en bolsas de basura, ese es el el equipo de protección, bolsas de basura, decidieron, totalmente sobrepasado por la situación (mi reconocimiento a ellos que si pensaran lo más mínimo en sí mismos abandonarían el puesto de trabajo) que no era necesario hacer ningún test. De hecho es que no se están haciendo los test. Porque no hay, y porque si los hay no valen nada. Por lo tanto el numero de contagios que se publica es ficticio, sólo vemos la punta del iceberg.


Para acompañar este despropósito, el gobierno ultima su DECRETAZO DIGITAL, una medida destinada a facultarle a cortar sin control judicial alguno, y a capricho, las comunicaciones a cualquier zona del Estado, así las verdades incómodas las tratarán de silenciar. Nos timan como a chinos, esa es la verdad y nuestros auténticos enemigos, están dentro de España y dentro de Europa, espero que algún día lo tendrán que pagar.

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