Boyer: del viva el bollo, al hoyo

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Murío Miguel Boyer, hoy es día de alabanzas , de halagos y chanzas. Valores innegables tuvo el ministro, que supo muy bien siempre centrar sus principios: el trepanado, tanto cerebral, cortando restos incómodos de su pasado «true social» a golpe de bisturí, y el de trepa progre e inmoral¹.



El Sr. Boyer, objetivo es decirlo , supo ser el ministro socialista que «liberalizó» la economía, a fin de cuentas ese fiasco de texto constitucional que tenemos por As de Bastos, o Carta Magna , ya establece la posibilidad (no hallen sorpresa) , mas que digo: la certeza de que España se constituya como estado «social» y «liberal», economía social de libre mercado (uhm ¿no acusan de ser algo parecido a China, o aún habrá de vaciarse esta magna expresión de su torpe y engañoso significado?)



Tan socialsta fue el Sr. Boyer, como lo es cualquiera de los actuales dirigentes, aspirantes, retorcidos o mangantes que no por ello, dejan de ser militantes, de ese enorme fiasco, titilante, que es el PSOE, que degenera siempre al mismo ritmo, no como el PSC, que lo tiene cambiante.



Y es que gracias al PSOE, y al legado de González, el partido ha sido siempre mas cuestión de veletas y de talante, más de falsedades incumplibles y programas cambiantes, electorados estafados, OTAN mediante, guerras yugoslavas e ideológicas masacres, de estertores estomacales y diarreas mentales, de aldeanismo político mas que de proyectos (como los marxistas) globales. Pero eso si, conformador de fortunas Boyantes, tan Boyantes como las de Boyer.



Y si, es que Boyer supo adaptar como nadie, el «american way» , el sueño americano, a la España ignorante, y supo hacer política económica, con medidas mucho más antisociales, que las que usaran los ministros de Franco, que al lado de tamaño genio del desguace, parecerían marxistas radicales. Supo desmantelar la sociedad, aumentar las brechas, y desde luego crear grandes oportunidades. Oportunidades tuvieron sus perros de tener baño propio en su mansión, y oportunidad tuvo él de realizar quebrantos constitucionales.



Estudiaba yo Derecho, y como ejemplo, y sabemos todos los profesionales, de lo que llamamos quebranto constitucional, tenemos esa esperpéntica actuación, que sin entrar en el fondo, fue una tropelía memorable, la expropiación de Rumasa, mediante métodos ilegales. Y no es cuestión de hablar del estado de aquel imperio, porque fue destruido, y es lo que importa, simplemente por furia de rivales. Y a eso llaman Estado de Derecho, era ya un ensayo, llegarían los Gales, la Razón de Estado, las fortunas personales y las guerras criminales. Tiemblen siempre que oigan decir, que para hacer el bien, será necesario partir de grandes males, ilegalidades de Estado y métodos criminales.



Inauguró Boyer, o cuando menos fue exponente destacado , del sueño español, que tantos frutos ha dado , trayendo tantos males, la cultura del pelotazo, el papel couché, y los trepas políticos profesionales. Quedara por explicar por siempre, de donde salió tamaña fortuna, que en bolsillo de proletario no cabe, y de la que estará oculta, porque con mujeres de gustos tan caros, ya se sabe ... no es suficiente lo que se enseña, nada baste.



Pero no dejemos de elogiar sus virtudes y vanidades, tan hombre de Estado supo ser, que fue asesor de Aznar, después de ministro de González, no tuvo bastante con ello, y presidió la fundación que lleva el nombre del carnicero de las Azores, matador de Iraques. Y aún le apuntan como éxito, haber sido secretario de política económica, del fracasado Zapatero, hazmereír de iniquidades.



Finalmente oirán decir que era un valiente, porque no quería morir ... cuando aferrarse a vida indigna , es más bien cosas de cobardes.Y no es que se aplique aquí al personaje, simplemente se establecen los términos, para estar atentos a las falacias de definición y retóricas fáciles. Que de mensajes halagüeños en exceso, estamos ya hartos. Y de chacales. No era un valiente, sino un vividor, con fortunas anormales, dineros de cuya procedencia ... nada se sabe, todo un héroe de inmorales (que aspiran a conseguir lo mismo por métodos tales) y amistades que de ellas dependen para mantenerse imperturbables.



Y desde luego, causa gran dolor su pérdida, su pérdida de España, perdida la dejó, y contribuyó a que sea más difícil hayarla. Nos metió de cabeza en la boca de esa hiena, de política económica y monetaria, de ideología bastarda  y arrogancias a la americana. Lloraremos sin duda, producida su muerte, que el legado que deja, con él no se vaya.

1No es otra cosa la moral que la costumbre, romper las costumbres propias como socialista, conlleva un acto inmoral por lo tanto.