U.K.
¡Vete ya! (III) Razones por las que a todos , ellos y nosotros nos
conviene el Brexit.
Quedan apenas unas horas para que se resuelva este referendo, y la sombra de la muerte de Jo Cox planea sobre las encuestas y previsiones de resultados. Si el imbécil criminal que la ha asesinado tan vilmente, disparando y apuñalando a una mujer indefensa ¿se puede ser más indeseable?, quería precisamente avivar el voto en contra del Brexit, lo ha conseguido. Extraño es incluso que nadie hay lanzado la teoría conspiratoria de que el infame criminal en realidad es una agente por pro «in». De hecho, si esa teoría no ha aflorado ya en la prensa amarilla británica y su homóloga continental es simplemente porque hay demasiados intereses en juego en contra del Brexit.
Ese asesinato es una ignominia, pero parafraseando a Nietzsche, que la aparición súbita de este (por lo demás involuntario) mártir decante la elección ... es nauseabunda. Nada tiene que ver el infortunio de esta mujer, que por haber muerto no se convierte en agente más brillenta, en intelectual de renombre, en experta, en autoridad moral ni siquiera en héroe. Desgraciada es lo que es. En mal lugar en mal momento. Eso es todo. Deplorable crimen, que no ha de convertir en nadie especialmente mejor al muerto.
Pero más deplorable es aún la actitud del Camarón de la Isla (Inglaterra), que sin ningún pudor saca a la palestra a la víctima para arañar el puñado de votos que necesita, no ya para la causa europea, sino para la suya propia, pues en estas elecciones le va la vida, política.
El caso es que hay importantes razones para estar a favor del Brexit. YT deberíamos ansiarlo más los continentales que los británicos. Algunas de estas razones se exponen a continuación.
La náusea de la élite económica y los «mercados»
Este es un factor principal. Hace años ya que se ha preconfigurado un panorama en el que se pretende que es malo todo lo que perjudique al «mercado» , entendiendo como tal al mercado financiero, es decir, a la economía más improductiva y alejada del soporte material de la existencia, a los especuladores que juegan a repartirse el poder y el mundo. Los argumentos pro mercado son asquerosos por muchas razones:- Presuponen que la teoría
económica del mercado liberal es la única posible, y la elevan a
categoría de ciencia (cuando no religión). Los presupuestos se
vuelven indiscutibles.
- Se pretenden establecer una
serie de leyes (las del mercado) que son inamovibles y que tiene que
aceptar gobierne quién gobierne, y todo país. Precisamente a que
esto sea así contribuye muy eficazmente (una de las pocas cosas
para las que se ha mostrado eficaz) la Unión Europea.
- Se pretende la entelequia
de que el mercado por sí proveerá de paz y seguridad. Algunos
imbéciles redomados, y personajes que deberían ser por definición
totalmente contrarios a estas ideologías como el expresidente
(¿socialista?) Felipe González , pretenden que es mejor que
«hablen los mercados» porque si no lo harían los cañones, como
ha pasado antes en Europa. Semejante argumento sólo es posible si
se ha abandonado el marco conceptual socialista (marxista), algo que
ya reconoció sin ningún pudor cuando reinventó el PSOE, ese
partido desdibujado que vamos a tener la suerte de ver desaparecer
muy pronto (único hecho positivo que se atisba de las próximas
elecciones). Los defensores de este argumento olvidan que los
motivos de las guerras europeas fueron siempre económicos ... Los
neoliberales quieren olvidarlo también, aunque lo saben
perfectamente, el paradigma es el mismo que el del marxismo clásico
, sólo la interpretación ética varía. La economía capitalista y
la marxista manejan las mismas categorías, no hay diferencias
funcionales. Para ambos paradigmas la economía lo es todo. De hecho
pocas dudas debería arrojar esta cuestión, puesto que si se
pretende que el mercado tiene virtualidad para «solucionarlo todo»,
por propia potencia negativa tendrá también virtualidad para
arruinarlo todo y producir no el maximum bonum sino el maximum
perversum.
- Banqueros financieros y
grandes empresarios se nos presentan una y otra vez como si fueran
los grandes gurús,
la élíte ético-filosófica, o como si hablasen por algo mas que
por sus propios intereses. Se convierten en héroes, para una
muchedumbre, que infectada de sueño americano los adora aspirando
algún día a ser como ellos. Así se nos presentan sus opiniones
como si fueran autos de fe, premisas indiscutibles y verdades
absolutas. Toda disidencia se convierte en herejía.
- La
democracia queda convertida en un folclore que sólo sirve para que
la élite se autolegitime ante la opinión pública, sin virtualidad
alguna de cambio. Es posible defender sistemas no democráticos como
opciones de gobierno, véanse las teorías platónicas o
aristotélica sobre la política, pero es infumable en todo caso que
los mercaderes pretendan erigirse en «aristoi» por las buenas.
Hace poco ya veíamos encuestas en las que se reflejaba que
ciudadanos de varios países empiezan a preferir gobiernos
autoritarios, como herramienta eficaz para atajar problemas a los
que ya no ven solución (algunos precisamente por la incapacidad de
la democracia para imponerse a los mercados). Como sabía
Aristóteles, la democracia no garantiza un buen gobierno (que nos
lo digan a los españoles) pero si garantiza mayor grado de libertad
caso de que haya un gobierno nefasto. Osea, se configura tristemente
como el mejor de los malos gobiernos, lo que la hace virtualmente el
mejor si somos de la opinión de que el poder por definición
corrompe, como pensaba Lord Acton, o lo que es lo mismo, que no hay
gobierno tendencialmente por sí bueno.
De todo lo anterior se deduce que precisamente el poder expansivo de estas élites económicas internacionalizadas, que va superando con creces al de los estados, tiene que ser minado hasta someterlo. Así que por negro que fuera el futuro fuera de sus dictados, cualquier camino que implique minar sus cuotas de poder significativamente no sólo es preferible, es un imperativo tomarlo, porque quizás aún estemos a tiempo de evitar catástrofes inimaginables que están por venir.
La decadencia cultural y política, los problemas del multiculturalismo.
Hablando de democracia, veía hace unos dias a una chica de origen africano, muy feliz de vivir en España, con tantos medios y soporte dados por ONGs que debe creer que está en el paraíso (un paraíso que desconocen todos los españoles empobrecidos, deshauciados, acuciados por las leyes, las cargas administrativas y la precariedad de su trabajo, si lo tienen) decir que las estructuras de Estado en Europa son antidemocráticas, porque los ciudadanos de la UE quieren acoger a los extranjeros sin límite, y sin embargo los gobernantes desatienden este anhelo. Infeliz, es víctima de lo que los antropólogos llamamos un «culto cargo». Los activistas pro-inmigración pueden armar mucho escándalo, pero no habrá gobierno europeo que se atreva al menos de momento a hacer un referendum sobre si se debe acoger o no a millones de ciudadanos extraeuropeos, especialmente musulmanes, africanos e indios, dentro de sus fronteras. Porque si lo hicieran, si la decisión fuese tomada democráticamente, en la mayoría de los países se decretaría la expulsión inmediata, el uso de violencia con armas contundentes en la frontera, el envío del ejército no para ayudar sino para repeler. No en vano los partidos de inspiración fascista crecen, pero también los izquierdistas con componentes anti-inmigración lo hacen, como el Movimiento 5 Estrellas.
Lo cierto es que la capacidad de acogida de nuestros estados es casi nula, puesto que son insostenibles , tanto se dice, los estados del bienestar con la población que ya tienen, menos sostenibles serán con población que sin haber aportado nada a las arcas pretende empezar a recibir en forma de derechos todo. Pero hay algunos que se beneficia de todo esto: los mismos sectores económicos del apartado anterior ¿por qué? Muy fácil, la curva de Phillips lo explica, se contribuye a crear una masa de indigentes «pobres» de reserva, necesaria para maximizar los beneficios, disminuir la litigiosidad laboral, arruinar el poder de los sindicatos, acabar con el poder de negociación de la izquierda y desorganizar la sociedad.
Ello aparte de que no todo se paga con dinero, nuestra libertad de expresión no tiene precio, y hay zonas en Europa donde esta ya no existe ¿se imaginan hablar de ciertas cosas en el centro de Bruselas?
Así las cosas, tenemos a un alcalde musulmán en Londres, lógicamente haciendo campaña por el «in» no por el «leave». Después de siglos para desembarazarnos del cristianismo, tras soportar nuestra Edad Media y tras las luchas del Renacimiento hasta llegar a la modernidad ¿ahora empezamos con esto? ¿Ahora que hemos sacado los crucifijos de las aulas tendremos que tener cuidado con las ropas que se ponen nuestras hijas? Estas son nuestras nuevas paradojas ¿ por qué se permite la financiación de obras apologéticas y proselitistas cuando ya hemos cercenado al cristianismo? La explicación de este multiculturalismo, no está simplemente en el buenismo ingenuo. Este buenismo malsano y atolondrado, multiculturalista y tan «respetuoso» de la «diversidad» no lo es tanto, pues no incorpora en esa «diversidad» a la cultura otrora dominante que se va disolviendo, y tiene tanto (en realidad más) derecho a luchar por su posición, ganada con el paso de los siglos. Además, como hacía Nietzsche preguntémonos otra vez a quién beneficia esto ... a las mismas élites económicas que reciben inyecciones de dinero de Arabia Saudí, que se lucran vendiendo armas que luego ya sabemos como reaparecen y para qué se utilizan, que necesitan masa de obreros indigentes y desesperados, sindicatos arruinados, sociedad multiestratificada para disolver en ruido los conflictos (mientras más desorden general, menos tiros llegan a la cúpula, qué cierto es eso).
Parecía un chiste ver en medio de la campaña por el Brexit, como la UE negociaba el tratado con Turquía para permitir la entrada futura y eliminar por lo pronto los visados. Ah, yo fui también imbécil en el pasado y creí que Turquía debía de tener derecho a entrar en el Club, ahora creo que somos los demás los que debemos tener derecho a salir, que entrase Turquia sería ya de por sí una excelente razón para salir y que Turquía esté en la Otan no la convierte en aliado, la Otan es en sí un enemigo muy peligroso, que sirve a las mismas estructuras de poder financiero y económico. Lo cierto es que sólo la amenaza de la libre circulación de turcos, es ya suficiente para legitimar la salida de la UE. El interés en estas medidas, que no es más que económico también, hace que las estructuras de la Unión, al contrario de lo que piensa aquella simpática africana no sean democráticas, nadie quiere esas hordas penetrando, el riesgo de quiebra de la Unión , que representa el Brexit, y el aliciente que podría ser para otros, haría que en este tema también, la Unión atendiera a las demandas de sus ciudadanos y se dejara de argumentar monsergas para mayor gloria de los poderes económicos.
Por otro lado, nada mejor para acabar con las teorías del «fin de la historia» a lo Fukuyama, que demostrar que no existe tal fin. Que un país salga de la unión demostraría que se puede salir, que hay vida más allá de la Unión, y permitiría hacer política puesto que en adelante ya no habría que complacer al «mercado único» como premisa principal y se podrían realizar otros proyectos con otros valores y otros enfoques. Si queremos que vuelva la política, es necesaria una demostración de que la UE no es invulnerable, que puede ser dinamitada y destruida desde dentro si no cumple con las expectativas que los ciudadanos pusieron en ella (uhm, un momento ¿alguna vez hubo alguna expectativa? ¿no empezó esto simplemente como un club de mercado, y no es lo que sigue siendo, sólo que ha conseguido doblegar los ordenamientos jurídicos para su mayor gloria?)
El IV REICH
Las prevalencias y manías de los germanos, son otro motivo de preocupación al que hay que poner freno. Esos que según sus propias encuestas siguen creyéndose «superiores» (sólo lo son como obreros especializados) a pesar de los numerosos escándalos (desde diseño de aviones suicidas, como el del Airbus fracasado en Sevilla, hasta los escándalos de automoción, etc. etc) diseñan las políticas de Europa a su propio antojo y nos van a llevar a la destrucción. La apertura a Turquía, por ejemplo y la guerra fría con Rusia (estúpidos ¿es que no os dieron bastante la última vez?) que precisamente si es Europa y heredera de la ilustración (modernidad) son síntomas de cerrazón . Pero aparte están los agravios comparativos, todos pagamos la reunificación alemana, que se produjo en contra de tratados internacionales, todos suspendimos las obligaciones de Alemania durante aquellas terribles inundaciones hace décadas, etc. Pero ahora ellos, sólo piensan en castigar, fustigar, imponerse por la fuerza, humillar, y destruir todo atisbo de oposición. Aplastar a Grecia, sancionar a España, a pesar de que nuestro presidente ha sido un vergonzoso lacayo. Han impuesto políticas económicas que no hay un científico social serio que comparta. Primero nos quieren llenar de extranjeros y luego fomentar la xenofobia. Hay que pararles los pies ... Salir de la Unión es la única demostración posible, y la necesitamos , de que puede uno librarse de esta mafia.
Sobre los efectos perversos económicamente hablando del Brexit.
También abundan las falacias:- No
es cierto que la salida de la UE presuponga un problema para
circular por el continente: Todos
los que gustamos de recorrer este continente maravilloso, sabemos
que Europa no es la EU, hay países más allá, a los que podemos
entrar libremente. La excepciones notables comienzan cuando nos
alejamos hacia el Este, precisamente por nuestra negativa a
relacionarnos adecuadamente con aquellos países que sí son Europa
y nuestros absurdos enfrentamientos con Rusia. Hasta ahora nunca
tuvimos problemas para entrar en Suiza, por ejemplo. Pero de seguir
así, Suiza suspenderá permanentemente Schengen.
- El
fin de Gibraltar u otros puertos francos: Argumento absurdo. El
estatus de estos enclaves depende de otras cosas, no sólo de la
Union. A fin de cuentas, siempre se ha quejado la Unión de que en
Gibraltar no cumple na normativa comunitaria, y así es porque
tiene un estatus especial, nada obsta a que siga teniendo un estatus
especial como lo tienen las islas anglonormandas.
- Contracción
de la economía: ¿Qué economía? UK está desmantelando su estado
de bienestar y no invierte en servicios. Perder un 3% como se augura
de PIB o hasta un 7% ¿es un desastre? Algunos inmuebles pierden
mucho más de valor para sus propietarios cuando los barrios se
llenan de musulmanes que impulsan a los nacionales a abandonar la
zona. ¿Cuánto valor pierde un inmueble ocupado? ¿Cuánto gasto
requieren aquellos que ya no entrarían? La comparación es falaz y
absurda aunque fuese real. Y nuevamente, no todo se paga con dinero.
¿Y la conflictividad social? ¿y el socavamiento de los valores
propios? ¿La propia forma de vida en peligro, no tiene un valor
superior? Además la posibilidad de hacer más política económica
propia permitiría devaluar moneda, y no gente, como hizo el
gobierno franquista en los 60, permitiendo el despegue económico.
Hoy, paradójicamente, se nos llena la boca hablando de libertad
mientras vamos dejando a la población en la indigencia, porque el
sacrosanto Euro es intocable y devaluamos eso, a la gente,
potenciando la inundación del mercado con productos (y
trabajadores) del exterior y reventando los salarios y la economía
productiva local.
- La
seguridad social de los británicos de la Costa del Sol: no se
preocupen Srs. Hubo soluciones antes y las habría después,
compañías de seguros aparecerían encantadas, o convenios
internacionales sacarían del paso, en cualquier caso las vacaciones
de unos pocos son un argumento risible. Y atención médica aquí se
da hasta a los «sin papeles»
- El
temor al cambio: esto tiene un nombre, conservadurismo,
y es una enfermedad.
Toda forma de vida, toda sociedad, evolucionan. El conservadurismo
es una ideología política que de por sí niega la idea de
progreso. Esta claro que lanzarse al vacío es una
irresponsabilidad, pero la facultad de reescribir el futuro es un
derecho inalienable cuando es razonada y razonable.
Los emigrantes comunitarios: Reciprocidad, la clave
También intentando infundir el miedo, se pretende la apertura del infierno para los británicos en el extranjero y los extranjeros comunitarios en UK, bueno, la situacion de estos ya se está viendo limitada, que se limite la de ellos no sería ningún agravio, pero en todo caso la clave es la reciprocidad. Como en todos los tratados internacionales, así que en algunos casos podría suponer eso hasta una mejora, los ciudadanos a uno u otro lado del canal serían tratados en reciprocidad a como se trata a los extranjeros en el otro lado.
El agravio comparativo.
De Gaulle ya decía que el Reino Unido era la avanzadilla de los Estados Unidos en Europa, algo de eso hay. Pero más allá, su insistencia en obtener privilegios (que consigue) es una agravio comparativo al resto de la Unión, que idiotizada cede pensando que le va la vida en ello. No es para tanto. Las relaciones con UK siempre fueron complejas. Pero pretender que se reescriban leyes a su medida es pretender configurarse como metrópolis de la colonia europea. Esto no se puede consentir. Por esta razón somos los continentales los que deberíamos desear el brexit.
Odiar a la UE no es detestar a Europa
Este es un mensaje que se ha visto en la campaña de los partidarios del Brexit «love europe, leave UE». Y ciertamente que sería un acto de amor que se fueran, pues seríamos los principales beneficiados. Pero llama poderosamente la atención que este mensaje no se haya difundido en noticiarios y prensa ¿por qué ha sido así? Pues porque se pretende hacer ver que Europa y la UE son lo mismo y a la vez que la campaña anti UE en una campaña «racista» contra el resto de los europeos o cuanto menos «xenófoba» que no es exactamente lo mismo. Identificar al partidario del brexit con alguien que detesta a Europa, sus culturas y habitantes es un insulto a la inteligencia y no se corresponde con la realidad. Se trata de una insidia perversa que pretende hacernos creer que la Unión Europea es lo mismo que Europa y que el modelo político que propugna se identifica plenamente con los habitantes del continente, que a decir verdad estamos hasta el gorro del mismo.
CONCLUSIONES:
El Brexit es una oportunidad de demostrar que hay vida fuera de la Unión, que las políticas de la UE son perversas, que no queremos que se disuelvan nuestras identidades, que los criterios economicistas capitalistas no son universales, que la gente, nuestros nacionales merecen un respeto ma allá de los beneficios de la inmigración para el sistema neoliberal, de poner freno al multiculturalismo expansionista desintegrador, de recuperar la política para el Estado, de demostrar que el modelo de la UE no es el único y de que no estamos ante el final de la historia. Es una oportunidad de arrojar una buena bofetada al conservadurismo y volver a soñar con la idea de progreso, de empezar otra vez para hacerlo mejor y de librarnos de la cultura del miedo. ¿Será doloroso? Lo son todos los divorcios, pero a la larga se demuestran que eran la mejor solución. Asumir un fracaso es doloroso, pero no asumirlo y seguir embargado de él hasta el final de nuestros días convierte la vida entera en fracaso y no deja resquicio para aspirar a algo mejor.
U.K ¡Vete ya!
Por desgracia, me temo que so salga la opción del Brexit victoriosa, hay demasiados intereses en juego, se tocarán todos los resortes y se harán todas las trampas. Pero aún me quedan unas horas para soñar con el milagro.
Me parece excelente todo lo que has escrito. Lo he leido y he disfrutado mucho, pero como bien dices, me temo que al final se quedarán.
ResponderEliminarAl margen de todas las razones que has expuesto y comentado, te queda una más de apoyo al brexit.....y es que son ingleses......
Muchas gracias.
EliminarHeme aquí , esperando, pues si ganara el Brexit, sin excusas, iba a organizar una fiesta de órdago, de las que duran noches inconfesables y producirían escándalo.
ResponderEliminarSublime, empezar a leer y no parar. Muchas de estas cuestiones ya las hablamos, y se agradece estas palabras que no le faltan ni un ápice de razón.
ResponderEliminar¡Fiesta!¡Fiesta!¡Fiesta!¡Fiesta!¡Fiesta!¡Fiesta!¡Fiesta!¡Fiesta!¡Fiesta!
ResponderEliminar